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Chavela Vargas
y
Frida Kahlo
Un día nublado de 1989 en la Ciudad de México un individuo se dirige a la Casa Museo Frida Kahlo. Se pone a llover y corre a resguardarse a una cantina cercana. Allí se encuentra con una anciana Chavela Vargas, que, entre vapores etílicos, empieza a contarle la historia de cómo conoció y pudo ser su relación con Frida.
Chavela Vargas amaba a Frida Kahlo. Algunos dicen que este amor era platónico por parte de ambas. Otros piensan más, mucho más. Lo cierto es que Chavela vivió en casa de Diego Rivera y Frida, y que ambas, a su manera, se amaron, se desearon, se necesitaron.
“Vivo para Diego y para ti. Nada más”, decía Frida Kahlo a Chavela Vargas en una carta que revela la devoción que sentían una por la otra.
La mexicana del poncho rojo y el tequila comentó no pocas veces que “amaba a la mujer, no a la artista” y que le unió a Frida su manera de pensar y de ser.
Interesante ese amor de Frida...
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